no ver, no respirar
no tener esperanza.
TRECE ROSAS,
por atreverse a vivir
encerradas entre rejas.
No llamar, no contestar
no ser hijas, no ser novias
no ser madres, no ser nadie.
TRECE ROSAS,
huérfanas en la madrugada,
aúllan fieros los cerrojos
un cura ofrece el perdón.
No llorar, no demostrar miedo
no renunciar a ser libres
no morir aunque te maten
no despreciar la palabra.
TRECE ROSAS,
iluminadas por la luna,
el paredón a la espalda
de frente...
El pelotón.
A las "Trece rosas" fusiladas el 5 de Agosto de 1936
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